El partido arrancó muy parejo, con un equipo chubu-tense que lo salió a jugar de igual a igual, pese a que los antecedentes marcaban a un Boca inexpugnable jugando de local.
A los 2 minutos del primer tiempo lo tuvo D’Augero, tras una gran asistencia de Fernán-dez, pero el uno visitante le ahogó el grito. Pero Racing no se quedaba atrás y en la contra nomás lo tuvo la visita, el partido había arrancado parejo.
Redondeando los 10 minutos de juego, el partido se hacía trabado, con un Boca que no lograba un juego asociado y un Racing que de contra lastimaba a la defensa del conjunto local.
Recién a los 16'
Boca tuvo que esperar a los 16 minutos del primer tiempo para tener la posibilidad de abrir el marcador. Fue a través de un excelente disparo de la figura de la cancha, Lucas Fernández que a punto estuvo de concretar el primero. Luego el partido entró en un ida y vuelta improductivo para el local que lo único que lograba era exponerse a las contras del equipo visitante que buscaba a través de esa vía inquietar al seguro “Bocón” Martínez.
Para colmo, a los 34 minutos de esa primera mitad, Mario Pérez se tuvo que ir de la cancha por una caída que le provocó una lesión en uno de sus brazos. Con el ingreso de Espeche, Boca fue un poco más incisivo ya que jugaba con 3 puntas y obligaba a su rival a defender con más gente.
Llegó el primero
Era el momento y Boca no desaprovechó la posibilidad. Tras el ingreso de Esteche, Racing se volvió más defensivo, esto llevó a que el local se adelantara en sus líneas y así fue que un gran zapatazo de Lucas Fernández decretó sobre los 39' del primer tiempo el festejo alocado de las casi mil almas presentes en el Defensores del Carmen. Boca ganaba y volvía a soñar con el tan anhelado ascenso.
Los últimos minutos del primer tiempo se fueron rápido, con un Boca cuidando la diferencia y un Racing que se fue quedando sin piernas, tal es así que a los 47 , de no haber sido por el palo, Lucas Ceballos hubiese decretado el segundo gol del Xeneize.
El segundo período
En el segundo tiempo, los primeros 10 minutos fueron todos para la visita. Para colmo, Boca se cargaba de amarillas ya que primero a los 8 y luego a los 10', Sandoval y D’Augero veían la amarilla.
Santiago Rapalín intuyó que el de ayer no era el partido de “Pepe” Quiroga y puso en su lugar a Becerra, para darle más peso a la ofensiva.
A los 15' del complemento Boca tuvo la más clara del segundo tiempo, quien lo desperdició fue el de Capital Federal, Lucas Ceballos. A los 21' otra ocasión para el local, esta vez quien lo pierde es Becerra que de cabeza estuvo muy cerca de concretar el segundo.
A pedir de Boca
Los últimos 20 minutos del segundo tiempo, fueron a pedir del local, debido a que la visita comenzó a sentir el cansancio del sintético del Defensores del Carmen y el Xeneize comenzaba a dominar el partido. A los 27 del segundo tiempo, el arquero visitante le sacó a Esteche el gol de la boca, a los 30' lo perdió la figura de Boca, Lucas Fernández. Faltando 15 Rapalín se la jugó con el ingreso de su cuarto delantero, Rodríguez en lugar de un volante, Lucas Ceballos.
La visita ya hacía rato se habia quedado sin piernas y Boca echaba el resto para lograr el tranquilizador 2 a 0.
A los 34' el arquero visitante le sacó el segundo al “Tigre” Rodríguez de manera milagrosa. En la contra lo tuvo Racing, pero Martínez salvó la caída de su valla.
Fue la única de la visita, a los 37 cerca estuvo Espeche del segundo. Luego el partido se volvió de ida y vuelta, con un Boca que iba por todo y un Racing que de contra buscaba la igualdad.
Tenía la sensación que algo iba a pasar y así fue. Cuando se jugaba el minuto 45 de la segunda mitad, apareció el goleador Raúl Becerra para poner el segundo tras un gran centro de Lucas Fernández, ahora sí Boca lograba la diferencia que había buscado en los últimos minutos.
Luego del segundo, el árbitro adicionó 3 minutos más en los cuales Boca aguantó a dientes apretados la diferencia que tanto había buscado y por el cual nos invita a soñar con que el próximo martes 30 de junio, quizá podamos decir que de Río Gallegos es el nuevo equipo ascendido al Argen-tino“B”. Ganó Boca y como ya hemos oído decir a muchos, “Las finales no se juegan, se ganan”.
Prensa Libre
