Con toda la ilusión a cuestas, el plantel de Boca Río Gallegos partió ayer al mediodía hacia Tandil, ciudad a la que arribó cerca de las 22:00, tras una previa escala en Capital Federal, donde tomaron un colectivo para llegar a destino.
Acompañados por una delegación de familiares y amigos que viajan en colectivo desde ayer por la noche, para llegar justo mañana, cuando los “Xeneizes” irán en busca del ascenso al Torneo Argentino “B”.
Los jugadores están motivadísimos, porque saben que están ante la oportunidad de hacer historia para el fútbol de Río Gallegos, volviendo a insertar a un equipo de la ciudad en la cuarta categoría del fútbol argentino, donde Santa Cruz no tiene representantes desde la deserción de Bancruz allá por fines de 2005.
En perfectas condiciones, y sin bajas a la vista, Santiago Rapalín repetiría los mismos once que consiguieron el triunfo por 2 a 0 en la cancha de Defensores, durante el partido de ida en una de las tres finales del Torneo del Interior.
Matemáticamente, a Boca le alcanza con perder con un gol para ascender directamente al Argentino “B”, aunque mucho mejor para ellos sería empatar o hasta conseguir un triunfo en tierras tandilenses.
Durante la presencia de TiempoSur en el aeropuerto local, los jugadores se mostraron confiados en poder conseguir el objetivo: “Vamos a traer el ascenso”, tiraron en la previa.
Sin embargo, con la experiencia que les dio el fútbol, saben que la confianza no quita el respeto por un rival que saldrá a jugarse a todo o nada mañana por la tarde.
El partido se jugará a las 15:30, en el estadio General San Martín y con el arbitraje del paranaense, Francisco Aguilera.
Para alcanzar la gloria, y tocar el cielo con las manos, Boca Río Gallegos deberá tratar de mantener el cero en su arco al menos hasta el final del primer tiempo, como para complicarle la vida a su rival que estará ansioso por convertir.
Jugando con esa ansiedad, Boca podrá plantarse de contragolpe y darle la estocada final a toda esta historia.
NO SE DEFINEN LOS ONCE
Tras la práctica de ayer, el entrenador de Independiente de Tandil definía la alineación inicial para recibir el domingo a Boca.
Mauricio Nosei, entrenador de Independiente, sufrirá las bajas de los mediocampistas Agustín Harguindeguy y Martín Zabaleta.
El primero de ellos fue expulsado en el cotejo de ida y sancionado con una fecha de suspensión, por lo que estará en condiciones de reaparecer en la Promoción, o bien en el primer cotejo de la próxima temporada.
Mientras que Zabaleta se retiró lesionado el domingo y su recuperación le demandará alrededor de 45 días.
En contrapartida, estará en condiciones de alistarse el zaguero central Diego Lecuona, también disminuido físicamente en el cotejo que abrió la serie.
De no mediar imponderables, Hugo Quintas volverá a ser el arquero; la defensa estará integrada nuevamente por Manuel Aguirre, Lecuona, Fabio Argüeso y Gerardo Villar; al tiempo que en la zona media surgen los interrogantes. Matías Petersen y Emanuel Morondo tendrían su lugar como titulares, mientras que para los otros dos puestos aparecen tres candidatos. Los hermanos Damián y Maximiliano Villar, y Luciano De la Canal. Aunque tampoco se descarta a Agustín Aguirre, reemplazante de Zabaleta durante el último encuentro.
En tanto, los integrantes de la delantera volverían a ser Ramiro Arteagaveytía y Alejo Solimanto.
LAS OTRAS FINALES
Las otras dos finales también tendrán su resolución mañana por la tarde, ya que, desde las 15:00, Ferrocarril Sud de Olavarría buscará sostener la ventaja lograda en la ida (1-0) visitando a Defensores de Formosa; mientras que para las 15:30 fue programado el cotejo en el que Unión Villa Krause (San Juan) será local de Atlético San Jorge (Santa Fe), ganador por 1-0 en la ida.
Los ganadores de esta instancia de cruces ascenderán al Argentino B, mientras que los perdedores dispondrán de una segunda oportunidad, a través de una Promoción ante conjuntos de esa categoría.
En el caso de Boca e Independiente, el perdedor se enfrentará contra Racing de Trelew en un doble enfrentamiento.
Tiempo Sur.
